Muerte en Venecia es la historia del compositor Gustav Von Aschenbach, interpretado por Dirk Bogarde. El protagonista escapa a Venecia, aquejado de una grave enfermedad que anticipa que éste será su último viaje. Dentro de los principales recuerdos que hace presente, está la carga de la muerte de su hija y el posterior fracaso de su matrimonio.
En ésta, que será la última etapa de su vida, revive las discusiones filosóficas y artísticas que tiene con su colega (Romolo Valli). Si el arte es puramente una creación basada en los sentidos, entendida como una racionalidad kantiana o si se necesita imprimir en una obra lo que siente el alma, es la gran dicotomía que debe enfrentar Gustav en su estadía en Venecia. Obsesionado con la belleza de Tadzio (Bjørn Andresen), ve en él la perfección de la juventud y cuánto extraña la flor de la vida.
Sobrecogedora, Muerte en Venecia mantiene al espectador involucrado de tal manera con el amor platónico que se gesta en aquel distinguido hotel, que se puede sentir la decepción y la vida ya marchita. Un hábil juego de cámaras, el rostro sereno de Tadzio, mediante primeros planos en los que se muestra la belleza en su máxima expresión, contrastados con numerosos enfoques de Gustav lleno de sentimiento, angustia y ensimismado en la tragedia, se puede sentir la historia, es posible sentirse enamorado del amor.
Teniendo como banda sonora música clásica que es la pasión de su protagonista, a lo largo del film se oyen fragmentos de Gustav Mahler, los que dan tiempos adecuados a las imágenes que acompaña. Desde Muerte en Venecia, su director (Luchino Visconti), comienza a utilizar piezas musicales ya existentes y a partir de ellas dar un ritmo a las escenas (al contrario de la mayoría de las películas que crean sus propias piezas musicales).
Este recurso fácilmente reconocible, convierte a esta película en una obra de arte que tiene como directriz precocupaciones existenciales, que la mantienen fresca e incólume al paso del tiempo. Gran guión, es la adaptación de una corta novela alemana, "La Muerte en Venecia" del escritor Thomas Mann. La adaptación son diálogos ricos que Bogarde materializa mediante una brillante actuación y que convierten a Muerte en Venecia, sin lugar a dudas, en una película de culto.
por la cresta que no haya visto muerte en venecia oiga. oye me gustan las fotos q ornamentan tu blog, notable la de the simple things =P. cacha que ayer vi una pelìucula de culto, de las llamadas clàsicas del cine: "expreso de medianoche" .. la viste??
ResponderEliminarah y respecto a la dicotomìa de gustav, me quedo con el lado que alude a "imprimir en una obra lo que siente el alma" =). si quieres subir màs soundtracks yo te puedo nombrar algunos notableees! besos leticitia, sigue viento en popa con tu blog de cine, es lo que amas y se nota. viva las pelìculas con finales inconclusos ! jajaja. cariñooos !!
oye no puede estar ganando el cursio caso de benjamin poooo jajaj vamos milk ! los gays arriba !
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